Los azulejos de pared o los pavimentos nominales, como los rectificados, deben colocarse con una junta de al menos un milímetro. Se aconseja utilizar crucetas regulables, disponibles en el mercado. Este tipo de azulejos o pavimento se denomina, erróneamente, azulejos de pared y de suelo con junta invisible. Sin embargo, los fabricantes recomiendan incluir siempre una junta. Hablamos de piezas que pasan por un horno y, cuanto más grandes, más imperfecciones presentan, se curvan y tienen algo de barriga, aunque sean del mejor fabricante del mercado. Si se colocan sin junta, a simple vista la pared parece defectuosa. Esto se debe a la barriga que acabamos de mencionar. Sobre todo cuando entra mucha luz natural, parece que la colocación sea incorrecta.